Hoy vamos a catar una de las grandes cervezas que existen, a mi juicio, en el mundo entero; la primera cuádruple que hubo con ese nombre (más alcohólica que una triple pero con el color y aroma más parecidos a una doble): La Trappe quadrupel, de los Países Bajos. Ya hemos catado con anterioridad cervezas de esta misma abadía (en la que he tenido la suerte de estar con mi padre): Isid'or y Jubilaris.
Esta preciosidad es el restaurante-pub que hay dentro de la propia abadía de Nuestra Señora en Koningshoeven.
La Trappe quadrupel. Cerveza trapense neerlandesa cuádruple. 10%.
Catada el 22 de diciembre de 2012.
- Ámbar rojizo intenso. Crema marfil espesa y duradera. Burbuja apenas visible.
- Intensidad aromática muy alta: caramelo, plátano, albaricoque, pan, flores blancas, piedra caliza...
- Muy cremosa, dulzona, con paso franco y fresco, punzante. Final ligeramente amargoso largo, con notas florales. Muy rica.
Es una pasada de birra, riquísima, pero hay que estar atentos porque emborracha mucho (10% es mucho alcohol). Para beber pausadamente, degustando, y mejor si es comiendo algo.
Esto es en el restaurante Navaro, de Sint-Niklaas, cerca de Amberes.
Podéis comprobar que cumplo mis propias recomendaciones: La Trappe quadrupel junto al café. En el BeNeLux es muy típico que el café lo acompañen de unas galletitas (como los famosos speculoos) y un chocolate o bombón, práctica que se agradece.
Durante noviembre (de 2016) tienen esta maravilla como cerveza del mes en la cervecería Oldenburg (Madrid). Aprovechad, es difícil encontrarla de barril y merece la pena.
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