La Goya

La bodega Delgado Zuleta, de Sanlúcar de Barrameda, fue fundada en 1744, aunque sus orígenes se remontan incluso más atrás, a 1719. Todo esto la convierte en la más antigua del Marco de Jerez, que ya de por sí tiene bodegas bien antiguas.

Aquí tenéis la bodega, en una foto que tomé ayer mismo, no hace ni 24 horas. Hay que ver qué días tan fantásticos hemos tenido a principios de esta semana.

Por supuesto, siendo de Sanlúcar de Barrameda, elaboran manzanilla, además de otros vinos de Jerez e, incluso, vinos de la tierra que no son generosos. No obstante, su producto estrella es el que hoy catamos, una manzanilla pasada denominada La Goya.

Hay varios tipos de manzanilla, y hasta la fecha no habíamos traído a Bebercio ninguna pasada. El grado alcohólico es el mismo que el de la convencional, pero el tiempo que ha pasado dentro de la bota es mucho mayor: unos 7 años. Esto le da una complejidad y una estructura diferentes, como ahora comprobaréis.

Por cierto, el nombre de "La Goya" lo toma de una tonadillera bilbaína célebre a principios del s. XX, Aurora Mañanos Jauffret, y no del pintor de Fuendetodos (ahora bien, Aurora sí había tomado su apodo del pintor, así que por ahí iban los tiros).

La Goya

Delgado Zuleta SA

DO Manzanilla - Sanlúcar de Barrameda

15%

Catada el 12 de abril de 2017.

• Amarillo muy pálido y limpio (pese al largo tiempo de crianza, que hacía augurar tonos dorados oscuros). Abundante lágrima.
• Intensidad aromática elevada: pan de leña, limón deshidratado, piedra caliza, almendras.
• Grasa y amplia (pese a que la manzanilla es un vino fino, esta tiene consistencia casi de vino gordo). Suave, delicada, con acidez y umami muy contenidos en su paso. La salinidad típica de estos vinos está presente, pero no es mucha (de nuevo auguraba más). Buenos taninos finales. Persistencia elevada. Excepcional.

La foto está tomada sobre el paseo marítimo de Rota. Al fondo se llega a intuir (si ampliáis) la capital, Cádiz. Marco fantástico para un vino fantástico, así da gusto. 

 

 

Otro apartado excepcional es el precio: la botella de 3/4 cuesta poco más de 6€, y la de 3/8 (como la de la imagen) no llega a cuatro lereles. Conste que no me llevo comisión ni tengo relación alguna con la bodega: si me gusta, lo digo; si no, también.