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viernes, 7 de julio de 2017

Rémy Martin XO

Rémy Martin es uno de los grandes nombres del mundo del brandy en general y del cognac en particular, de quienes ya hemos catado alguna cosita por aquí.

La casa se fundó hace casi tres siglos (en 1724) en la propia ciudad de Cognac (Francia), y se ha especializado en elaborar bajo la denominación de origen (o, en Francia, AOC) Fine Champagne.

Fine Champagne es una AOC que, como sabéis, resulta de la mezcla de aguardientes provenientes de las AOCs Grande Champagne y Petite Champagne (al menos la mitad debe provenir de la primera). Estas dos AOCs se corresponden con verdaderos terruños, pero Fine Champagne no, obviamente: ya os digo que resulta de la mezcla de ambas.

Aunque otras casas elaboran también coñac Fine Champagne, ninguna ha llegado a asociarse tantísimo con esta AOC como Rémy Martin, cuyos productos caen todos únicamente bajo la misma.

En esta casa la destilación se lleva a cabo siempre sobre lías (los restos de las levaduras que han llevado a cabo la fermentación) y el envejecimiento tiene lugar en barricas de roble de Limousin.

Precisamente hoy vamos a probar un coñac de esta casa, , y no uno cualquiera: el elegido es XO, que resulta de la mezcla de hasta 400 aguardientes diferentes. De ellos,  el más joven debe haber envejecido al menos seis años (normalmente bastante más).

Este brandy se lanzó en 1981, obra del maestro elaborador André Giraud, que quería conmemorar los tres siglos de la AOC Fine Champagne.

Rémy Martin XO Excellence
E. Rémy Martin & Co.
AOC Fine Champagne
40%
Catado el 6 de julio de 2017.
  • Ámbar cobrizo oscuro, de capa muy abierta, limpio y con escasa lágrima.
  • Intensidad aromática alta, pero no muy alta: vainilla, natillas, galletas María, clavo. Notas picantes de cayena. Algo de cuero. También, tras agitar, naranja amarga, chocolate negro y hogar.
  • Muy cálido y potente en el ataque, tanto que un servidor, contrariamente a los elaboradores, recomienda diluir (por ejemplo, un hielo en la copa). Ataque dulzón, alcohólico; paso umami, sin metal ni sal. Final cálido, sin grasa; largo y con notas de humo y canela.

 Un brandy muy goloso, para los postres. La botella es una preciosidad, por cierto.

¿Y los precios? Pues de lo más variable, pero siempre muy altos. Un precio habitual rondará los 200 pavazos (por ejemplo, en El Corte Inglés está a 225); se puede encontrar algo más bajo en Vila Viniteca, a 160; después es posible ver precios como los de Uvinum, a 117,50€, a los que hay que sumar los gastos de envío, claro. Conclusión: es caro pero, si se mira bien, se puede uno ahorrar algún eurillo.


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