Krug rosé

Dentro de unas horas volaré hacia Bélgica, así que, seguramente, durante una semana no haya muchas actualizaciones en este vuestro blog favorito. No es que me duerma en los laureles, es que estaré visitando monasterios trapenses y restaurantes chulos para contároslo después, me debo a vosotros.

Como regalito previo a mi partida, os dejo la cata del, hasta la fecha, mejor espumoso rosado que he tomado en la vida. Tuve la suerte de que me lo regalaran por mi cumpleaños en 2011, y lo bebí con mi madre y dos tíos míos. A mi madre no le gustan los espumosos rosados (los blancos sí) pero, pese a este inconveniente, el que hoy nos ocupa le encantó, igual que a todos los que lo bebimos.

Krug, que en la actualidad forma parte del gigante LVMH, es una casa francesa de Champagne sita en Reims que solo elabora cuvées de prestige, es decir, vinos para grandes ocasiones y que cuestan una pasta (este anda por los trescientos pavitos, y es de los más asequibles). Vamos con la cata de esta joya:

Krug rosé
Krug SA
AOC Champagne
12%
Catado el 12 de junio de 2011

• Dorado rojizo con tonos cobrizos muy pálidos. Burbuja diminuta. Lágrima abundante.
• Increíblemente complejo y con gran intensidad aromática: mantequilla ahumada, hierro, vinilo, sobrasada, papaya roja, naranja confitada, nuez, hueso y piel de melocotón, pan tostado, cerezas, levadura, pomelo rosa, café...
• Punzante, suave, con el carbónico bien integrado (tened en cuenta que la botella tenía más de 10 años cuando me la regalaron). Fresco, intenso, con notas cítricas en un final muy largo y cremoso.

A la izquierda, mi tía; a la derecha, mi tío. En el centro, hecho un pincel, el que suscribe; detrás de la cámara, mi madre. Fijaos qué color tan anaranjado tiene el vino: delicioso. No juzguéis nunca por el color.