Hoy probamos su 360º, que la primera vez me gustó tan poco que me devolvieron el dinero al verme la cara. Aquella vez ni le hice cata, pero la semana pasada le di una segunda oportunidad, y el resultado... no ha sido mucho mejor, la verdad.
Me temo que no voy a hacer muchos amigos con esta entrada (hasta me saldrán trolls, ya veréis), pero no quiero dejar de contaros la verdad, que sois muy majos y os merecéis que sea sincero. Para dar una de cal entre tantas de arena, diré que la botellita y el diseño de la etiqueta son preciosos, con mucho estilo. Algo es algo.
La Virgen 360º. Pilsner española. 5,5%
Catada el 26 de marzo de 2017.
- Dorado ambarino con irisaciones verdosas. Ligeramente turbia. Crema nívea muy efímera.
- Aroma entre Clamoxil y naranja (es decir, un punto medicamentoso desagradable y otro cítrico como notas predominantes). También hierba y algo de pan. Para estropear incluso más la fase olfativa, con la temperatura aparecen notas animales defectuosas, parecidas a las que encontramos en la Jamonera.
- Carbónico algo elevado. Seca, insípida. Final breve, ligeramente amargoso. Bah.
Pues no me gustó la primera vez, y tampoco ahora. Jo.
Antes de cerrar, quiero recordaros que la segunda vez que probamos la Madrid Lager había mejorado mucho y así lo reconocí: por tanto, si La Virgen mejora la receta de esta cerveza o si probamos otra suya que nos guste, así lo haremos constar; que no se trata, como se suele decir, de jurar odio eterno a los romanos. Tengo mucho respeto por todos los elaboradores, que se esfuerzan mucho. Pero si no me gusta... pues no me gusta.
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