Formidables Azpiri y Nacho en Mot.
Este vino fue un regalo que me hicieron mi padre y madrastra allá por el año 2008, tras un estupendo viaje que se marcaron ambos a Navarra. Resulta que por la comunidad foral, concretamente en la localidad de Carcastillo, hay un monasterio cisterciense declarado BIC (Bien de Interés Cultural) que fue fundado en el s. XII y que está bajo la advocación de Santa María de la Oliva. Todavía (y subrayo el adverbio) no lo he visitado, así que tampoco tengo fotos propias. De nuevo os suplico disculpidas.
Los monjes que lo habitan pertenecen a la Orden Cisterciense de la Estricta Observancia, esto es, son trapenses. Así pues, aunque no he visto por ninguna parte que su vino tenga el sello de "producto trapense auténtico", lo voy a ir incluyendo motu proprio. Como buenos seguidores de la regla de san Benito, dan importancia al trabajo manual y a sufragarse los gastos a través de su labor y no de limosnas, por lo que, cuando necesitan dinero, sacan vino al mercado.
"Cuando necesitan dinero" no es siempre, por lo que pueden estar tiempo sin elaborar nada. De hecho, tengo entendido que tras la añada que os traigo estuvieron una década sin actividad vinícola, así que hay que andarse con ojo si uno quiere probarlo.
El de hoy es un crianza elaborado con uvas de las variedades merlot, tempranillo y cabernet sauvignon; todas ellas propias, claro.
Monasterio de la Oliva crianza 2005
Abadía Cisterciense de Nuestra Señora de la Oliva
DO Navarra
13,5%
Catado el 3 de octubre de 2008.
- Cereza pálido con ribete ojo de perdiz.
- Una primera nota marcada de cuero. También frutas rojas: cereza, guinda, fresa y grosella. Regaliz y notas terciarias matizadas: cacao, salsa de soja.
- Cálido y sedoso. Bien integrado, con paso ligeramente salino. Final largo con taninos contenidos.
Imagen de Internet. Voy a intentar acercarme al monasterio en persona un día de estos y contaros un poco más al hilo de nuevas catas. Seguro que merece.
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