Licinia 2011

En Morata de Tajuña, provincia de Madrid, se elabora un tinto que tiene una de las mejores etiquetas que he visto en mi vida. Realizada por Paco Posada, es claramente deudora de la obra de Chillida, y tiene las peculiaridades de que, primero, etiqueta y contraetiqueta son la una el negativo de la otra y, segundo, la contraetiqueta lleva toda la información mientras que la etiqueta va en blanco.

No soy el único que piensa que la etiqueta es genial: el diseñador de moda cordobés Elio Berhanyer le otorgó a la añada de 2006 el premio a la botella mejor vestida del país (y el diseño era idéntico). Estos galardones los otorga cada año dentro de los premios Mezquita-Córdoba, y son señeros dentro de la atención a botella y etiqueta.

Esta es la contraetiqueta, que lleva escritos el nombre, la añada, la DO, la bodega, el grado, la capacidad, el código de barras... todo.

El vino está elaborado fundamentalmente con tempranillo, acompañada por syrah y cabernet sauvignon. Pasa un añito en barrica de roble francés antes de ser embotellado, y sale por unos 24 lereles.

Licinia 2011

Bodegas Licinia SL

DO Vinos de Madrid

15%

Catado el 29 de mayo de 2017.

• Picota cubierto con ribete cardenalicio.
• Empieza cerrado. Intensidad aromática media: humo, naranja sanguina, cereza, canela.
• Suave al tacto pese a la potencia. Paso liviano, con marcadas notas salinas y pungentes (ahí está la cabernet sauvignon haciendo de las suyas). Breve, versátil, rico.

Y aquí tenéis la etiqueta, sin una sola letra. Se ha terminado convirtiendo en icónica, así que hacen bien en no cambiarla: no hay que arreglar lo que no está roto.