Nobleza del sur - Only for Children

Crear un nuevo nicho de mercado. De eso se trata.

El mundo de los negocios tiene una serie de reglas, y la competencia no es fácil. Así que, en ocasiones, el truco está en no competir, sino en generar un producto nuevo, sin competencia. Y eso es lo que hoy os traigo aquí: un aceite de oliva para niños. Solo para niños. Only for children.

¿Los niños no pueden tomar AOVE, como si de una bebida alcohólica se tratase? Claro que pueden, sin problema alguno. ¿Los adultos no pueden tomar este aceite, de verdad es solo para críos? Claro que no, yo soy adulto (eso creo) y aquí lo estoy catando. ¿Entonces?

Pues eso, abrir un nicho. Aprovechando que, efectivamente, el sabor amargo y picante del aceite de oliva es un gusto en muchos casos adquirido y, por tanto, habrá niños a los que les resulte difícil de entrada, sacamos este elaborado con alguna variedad más suave y lo etiquetamos con dibujitos infantiles (niñitos, mariquitas), lo envasamos en una botella bajita y gordita y le ponemos lo de "only for children" bien evidente. Una genialidad.

La variedad elegida es arbequina, reconocida por su ligereza y suavidad (en algún etiquetado se columpiaron y decían que era picual, que es justo lo contrario: muy amarga y bastante picante; creo que no se llegaron siquiera a comercializar y que ya dice lo de arbequina en todas).

Nobleza del sur - Only for Children
100% arbequina AOVE
Aceites Castellar SL
Catado el 30 de mayo de 2018.

• Frutado medio-bajo: el aroma fundamental es manzana verde, acompañada de almendra dulce.
• Amargo muy bajo. Algo acuoso, sin untuosidad acusada (de hecho, apenas recubre la boca).
• Picante muy bajo también. Persistencia reducida, aunque sí deja un toquecito en la garganta.

Desde luego, si a un niño (o adulto) el sabor general del AOVE le parece demasiado agresivo, este cumple su promesa de ser suave y liviano. ¿Solo este? Pues no, la mayoría de arbequinas entran dentro de estos parámetros.

Pero este tiene un envasado muy cuco, lo que lo hace fácil de recordar y reconocer entre otros; a los niños (y no tan niños) les gustará el detalle de la mariquita y de los críos vareando de la etiqueta, y eso sí puede marcar la diferencia a la hora de elegirlo frente al resto. De modo que han sabido identificar el nicho de mercado potencial y generar un producto para llenarlo. Me descubro ante eso.