Estamos ante una de las cervezas consideradas muy grandes: en RateBeer dicen que es la mejor tripel del mundo entero, los del WBA la nombraron mejor pale ale en 2008, los del WBC una década antes le dieron la medalla de oro a mejor tripel...
...Y aquí llego yo ahora para decir que sí, que está rica, pero que ni es para tanto ni, sobre todo, es una tripel. Se pongan como se pongan.
Estoy de acuerdo en que las definiciones de dubbel, tripel y quadrupel son bastante laxas; es verdad. Y que esta cumple lo de ser rubia y andar entre 8 y 9% de grado, hasta ahí bien. Pero ni tiene carga de lúpulo, ni notas balsámicas, ni amargor alguno, y por ahí no paso. Además, todos estos estilos son de cervezas elaboradas con malta de cebada, y la de hoy tiene cebada, sí, pero junto a trigo y avena, nada menos. Y de ahí le viene lo de "triple": triple cereal. No viene del estilo.
Además, lo de "carmelita" es un pegote: dicen que se inspiran en una receta original de monjas carmelitas del s. XVII, pero la realidad es que la elaboran los de Bosteels (ahora ABInBev) y solo desde 1996. Es industrial, y pertenece a un conglomerado global enorme.
Insisto, no está mal en absoluto, pero no nos flipemos, que luego vienen el llanto y el crujir de dientes.
La he tomado varias veces a lo largo de los años, pero hasta ahora no la había catado para el blog. Venga, vamos allá.
Tripel Karmeliet. Ale belga elaborada con cebada, trigo y avena. 8,4%
Catada el 6 de agosto de 2018.
- Dorado pajizo, brillante e intenso, con irisaciones verdosas. Crema espumosa nívea, abundante pero efímera.
- Intensidad aromática media-alta: predominio de notas cítricas (bergamota, yuzu, limón); algo de cereal, poco más.
- Suave y cremosa (se nota la avena), con carbónico contenido. Buena acidez, escaso umami, ningún metal ni amargor. Persistencia media. Rica y punto.
Servida en su propia copa, con el río Mosa de fondo a su paso por Dinant en un día precioso.
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