Tremendo nombre, y no nos podemos saltar ni una coma (que no hay) so pena de confusión con otras cervezas. Me explico:
Cervezas que se llamen "Black Barley" hay muchas, así que especificamos quiénes la elaboran: en este caso es una colaboración entre La Quince y Guineu. Pero no queda ahí la cosa, porque ellos mismos podrían elaborar esta misma birra sin envejecerla, o envejeciéndola en diferentes barricas (creo que, de momento, no es el caso). Para evitar confusiones, aclaramos que está envejecida en bota de oloroso.
Bien, hechas las aclaraciones nominales, pasemos a las materiales: estamos ante un vino de cebada (barley wine), un estilo muy interesante pero poco habitual, que da cervezas muy alcohólicas y con potencial de envejecimiento; en este caso, nada menos que año y medio. Por si eso fuera poco, después pasa otro tanto en botellero (o, en el caso de la versión de grifo, que es a por la que vamos, dos años en barrica).
- Caoba oscuro con crema muy escasa color hueso que desaparece en un santiamén.
- Intensidad aromática elevada. Recuerda a un buen PX: frutas deshidratadas (prunas, dátiles, higos, pasas), miel, melaza.
- En boca, llama la atención la casi total ausencia de carbónico; eso, unido a que es una cerveza sedosa, y a los aromas, nos remite de nuevo a un PX o a un cream. Paso bien marcado, con muy buen umami y notas picantonas. Poco a poco aparecen puntas salinas y un amargor muy equilibrado, terminando en un final pungente y tánico muy duradero. Lo tiene todo, y todo bueno. Deliciosa.
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