En esta primera entrada del mes de junio, con sus días largos y alegres, vamos a catar un vino largo y alegre, de esos que invitan a compartir con buenos amigos, acercándonos a Jerez de la Frontera, a las formidables bodegas Tradición.
Tradición es una bodega caracterizada por elaborar únicamente VOS y VORS, esto es, jereces viejísimos (con envejecimientos superiores a 20 y 30 años, respectivamente; hemos catado ya su amontillado VORS). No obstante, también tiene un fino que, pese a ser un rato viejo, "solo" llega a los 10 o 12 años, así que no entra en esas categorías.
Lo vamos a probar a partir de formato magnum, bien interesante y limitado (750 botellas para esta saca, numeradas), y conociendo la fecha de la saca (es decir, cuando pasó de la solera a la botella, algo que no se suele especificar en el vino de Jerez): octubre de 2019, algo más de un año antes de la cata.
La botella (de litro y medio) sale por unos 60 eurípides.
- Dorado muy intenso con irisaciones verdosas (estos vinos suelen ser mucho más pálidos, se notan los años extra). Limpio, está clarificado.
- Intensidad aromática media-alta: almendra, hierro, oliva verde, caliza. Hasta aquí, son todos aromas propios del estilo; además, tiene también una nota muy chula de alcachofa (en vinos es toda una rareza, no así en aceites de oliva).
- Muy seco en su ataque. Algo más gordo que la mayoría de finos (supongo que debido también a ese tiempo añadido en bota). Paso pungente y muy amargoso. Final larguísimo, con mucho fruto seco: almendras, nueces, avellanas...
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