Diez años, cien restaurantes

Para los dos o tres lectores habituales de Bebercio será evidente que el título de esta entrada dialoga con el de otra, reciente, dedicada a los diez cócteles publicados en estos diez años, entrada que se publicó con ocasión del décimo aniversario de la primera entrada dedicada a la coctelería en este blog.

Bien, resulta que hoy se cumplen diez años de la primera entrada dedicada a un restaurante, y cualquiera que haya seguido Bebercio estas últimas dos semanas  (los dos o tres lectores arriba mencionados) se habrá percatado de que hemos metido varios restaurantes seguidos. ¿La razón? Llegar al cumpleaños con números redondos, para poder recapitular y cavilar como hiciéramos con los cócteles.

Es obvio que no voy a ir de restaurante en restaurante; eso lo pude hacer con los combinados y mejunjes porque eran solo diez, pero aquí hablamos de una centena redondita. Lo que si podemos hacer juntos es un poco de estadística y autoconocimiento para ver en qué terrenos y entre qué lindes nos movemos. Algo especialmente sencillo si tenemos en cuenta que, siendo cien restaurantes, los porcentajes salen solos.

Aunque no resulte lo primero que a uno se le viene a la mente a la hora de hacer recuento, quiero empezar viendo cuántos de los reseñados han cerrado (cerrado del todo, no cambiado de ubicación o dueño). Algo más de una cuarta parte, 26 de los cien (26%, evidentemente). Los restaurantes son negocios generalmente efímeros, aunque hayamos visitado alguno con más de un siglo a las espaldas.

De acuerdo, hagamos ahora un análisis por nacionalidades. Siendo este un blog español no puede sorprender demasiado que el 61% de los restaurantes se ubiquen en España. El segundo país más representado es Bélgica, con un 15%. Después Portugal, con un 6%, y el Reino Unido, con un 5%. Canadá, el único país no europeo por el momento en la lista, se lleva un 4%. Países Bajos y Luxemburgo, los otros dos países que, con Bélgica, conforman el Benelux, tienen cada uno un 3%. Finalmente, con un solo restaurante en Bebercio, hallamos a Francia, Alemania y Suiza.

Todo esto está muy bien, pero esa sobrerrepresentación hispana requiere mayor análisis. Veamos, pues, las provincias: hay la friolera de 44 restaurantes madrileños, ahí es nada... Pero es porque el blog se escribe desde Madrid. Es una cuestión de oportunidad. De esos 44, seis son de Alcalá de Henares (que nos gusta mucho en Bebercio) y los otros 38 de la capital (así pues, el 38% de los restaurantes que han aparecido por aquí son de la ciudad de Madrid. Jarl).

La siguiente provincia es Valencia, que cuenta con ocho establecimientos visitados y publicados (también sabéis que Valencia gusta mucho en Bebercio). De ahí bajamos ya bastante: Sevilla tiene dos, otros dos tiene Toledo, y con uno solo nos encontramos las provincias de Alicante, Cádiz, Cantabria, Soria y Teruel. Aunque la capital esté sobrerrepresentada, no se puede negar que nos hemos movido por los cuatro puntos cardinales de la Península Ibérica (ahí incluyo los seis restaurantes portugueses también, por supuesto). De norte (Cantabria) a sur (Cádiz) y de este (Alicante) a oeste (Oporto).

Vamos con otro tema que sale a relucir al hablar de restaurantes: las estrellas Michelin. ¿Cuántas hemos reunido en esta década? Pues nada menos que 35, agüita. Mogollón, repartidas en siete países. También 15 Bib Gourmands, la distinción que a menudo se entiende como la pre-estrella.

Sabed que hemos visitado restaurantes de una y de dos estrellas, pero nunca uno de tres en el momento de nuestra visita: DiverXo y Zilte consiguieron la tercera después de nuestra visita, Zalacaín había ostentado las tres mucho antes de que nos dejáramos caer por allí.

Un último apunte: aunque haya tantas estrellas, también nos dejamos caer por tascas, bares, freidurías, pubs y tabernas, quizás no consideradas restaurantes por otros pero sí por Bebercio: representan un nada desdeñable 15% del total. Y luego están los tres restaurantes de aeropuerto, una categoría particular en sí mismos de la que ya hemos hablado y que esperamos reivindicar e incrementar para que dejen de ser cadenas sin personalidad y evolucionen a destinos apetecibles.

Gracias por vuestra atención. Seguiremos recalando de tanto en cuanto en restaurantes para vuestro disfrute, que también hay que comer algo entre tanto bebercio. Un beso y un abrazo.